1. LA INFORMACIÓN ES IMPORTANTE PERO SOLA NO BASTA.
Debe ir acompañada de procesos de aprendizaje y desarrollo personal. Lo que protege a una persona contra los riesgos, es la capacidad de tomar decisiones, de manejar presiones sociales, estados emocionales, etc.
2. SIEMPRE SE PUEDE HACER PREVENCIÓN, AUNQUE NO HABLEMOS DE SUSTANCIAS. ¿CÓMO LO HACEMOS?:
3. PARA HABLAR DE DROGAS ES NECESARIO:
Para que nos escuchen y el mensaje que queremos transmitir cale en la persona, la información no puede ser continua y machacona. Tiene que estar muy dosificada e intercalada en otros temas de conversación totalmente distintos.
Podemos aprovechar un programa de televisión o una noticia para sacar el tema.
Suele resultar difícil encontrar el momento para hablar de determinadas cosas, no pierdas la oportunidad de hacerlo cuando están interesados. No solo habrás desperdiciado el momento, sino que tu falta de tiempo o de interés puede hacerles sentir poco importantes, menos confiados y menos comunicativos.
Si en la familia hay costumbre de dialogar, no va a ser difícil incorporar el tema del consumo, sino se vivirá mal o no habrá momento para abordarlo.
Infórmate antes, asegúrate que tienes los argumentos que necesitas, para ser eficaz y no encontrarte inseguro, ridiculizado ( “ no tienes ni idea…”) o desbordado en la conversación.