Este aprendizaje debe iniciarse en la infancia. A veces, a pesar de la educación, en nuestros hijos encontramos rebeldía e incumplimiento de normas. Que puede deberse al propio proceso adolescente o a otros factores, que debemos tener en cuenta.
Es necesario encontrar un punto intermedio, para que tengan suficiente libertad para crecer, pero que estén protegidos de los riesgos y se sientan apoyados y formando parte de la unidad familiar.